La Plata, 1939-2000. Fue un ilustrador, diseñador gráfico, caricaturista y escritor Argentino.

Especializado en temas infantiles, colaboró también en la revista Billiken y en el suplemento infantil del diario La Nación. En 1978 comenzó a colaborar con ilustraciones e historietas en la revista Hum® donde más tarde integraría el equipo creativo.

Ilustró a partir de 1979 las tapas de El Péndulo, revista de ciencia ficción que había nacido como suplemento de la revista Hum®. 

Colaboró en muchas campañas destinadas a difundir los derechos del niño, ilustrando carteles y folletos. Fortín fue un hombre que guardaba en su bagaje de experiencias vitales unas cuantas de esas particularidades. Fumador, tanguero, admirador de la milonga y muy ocurrente, hasta aquí algunos de sus rasgos de identidad nacional. Pero además fue una argentino singular, sensible y complejo. Un observador implacable de la realidad. Fue por oficio… un dibujante, por vacación… un filosofo, por elección… un padre. Por talento… un maestro.

Palabras de un compañero de la revista HUMO(R):

– “Lo conocí en la mítica redacción de la revista formando parte de un grupo singular, allá por el año 83´. Era una especia de selección nacional de cracks dirigida por el Tano Cascioli y plagada de titulares como El Flaco Dolina, El Negro Fontanarrosa, entre otros.”

– “Fortín dibujaba esos meticulosos muñecos que parecían formar parte de un mundo lejano y querido, fervientemente extrañado por su autor. Su ojo implacable y su mano diestra reflejaban esos sutiles detalles que promovían el más argentino de los elogios. Porque nada quedaba al margen de aquellas imágenes que atrapaban la escencia de las cosas. Planteaba todo con un detallismo no exento de simpleza, dibujaba así: con un trazo limpio pero prestando atención a el detalle que permitía imaginar un mundo, casi siempre lejano, siempre querido. En cada cuadrito una escena reconocible y generalmente entrañable.”